Tener una buena salud mental es fundamental para nuestro desempeño diario. Por eso, es relevante considerar en nuestra rutina prácticas que nos brinden bienestar, como el yoga.

Esta diciplina tiene muchos beneficios para nuestro cuerpo. “Puede mejorar nuestra relación con el estrés, uno de los factores que más afecta nuestra salud mental”, dice de entrada Jaime Villalobos, psicólogo colaborador del Contigo en el Recuerdo.

Esto ocurre porque el yoga nos brinda la “capacidad de respirar conscientemente y relajar nuestro cuerpo, lo que nos llena de energía vital”, explica el psicólogo.

¿De qué forma pasa esto? Esto ocurre porque una buena postura corporal con músculos en buen estado previene dolores y cansancio en zonas tan sensibles como el cuello y la espalda, y contribuye a una mayor capacidad de resistencia a los esfuerzos físicos.

Además, Jaime Villalobos agrega que “también entrena a nuestra mente, ya que le enseña a tolerar mejor las sensaciones corporales”.

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Duelo y yoga

El yoga es una práctica que ayuda, entre otras cosas, a un mayor y mejor control físico y mental. Podemos realizarla cuando nos sentimos estresados y también, cuando experimentamos intensas emociones debido a la pérdida de un ser querido.

¿Cómo nos puede ayudar el yoga durante un proceso de duelo?

Sabiendo que existen una serie de formas de sobrellevar la pérdida con otras actividades, el yoga puede ofrecer un espacio de aceptación y sanación emocional.

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El yoga nos puede ayudar a conectarnos con nosotros mismos, y a entender de mejor manera las emociones y sensaciones de nuestro cuerpo ante la pérdida.  

“Esto implica la posibilidad de conectar y desconectar de nuestra experiencia a través de la distracción o la concentración según donde se ponga el foco de nuestra atención entrenada. Podemos ponerla en nuestro cuerpo cuando deseamos conectar, o bien, poner nuestra atención en la respiración cuando necesitamos relajarnos”, complementa.

De esta manera, concluye el profesional, el yoga puede ser un catalizador del proceso de duelo y una herramienta que sostenga al mismo proceso que estamos viviendo.

“Cada persona experimenta beneficios de manera distinta, por lo que el yoga podría ser útil para algunos y para otros no. Lo importante es que esta práctica sea lo más cómoda posible y que entregue tranquilidad”, detalla Jaime Villalobos.