Cuando las personas viven un duelo inician un proceso de transformación, ya que aprenden a vivir sin la presencia física de quien ha partido.

“Nos transformamos cuando logramos seguir adelante con el recuerdo del ser querido fallecido, y los momentos vividos los guardamos en nuestra memoria”, afirma Paula Merino, psicóloga colaboradora de Contigo en el Recuerdo.

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Para experimentar la transformación, es muy importante que durante el duelo contemos con redes de apoyo que nos brinden compañía y nos contengan en los momentos complejos.

“Acércate a personas de confianza que estén viviendo o que hayan enfrentado una experiencia similar a la tuya, porque podrán entender tus emociones”, recomienda la psicóloga.

Otro aspecto clave es trabajar en nuestro autocuidado, y para esto, debemos permitirnos disfrutar de actividades recreativas o incluso estar en soledad si así lo deseamos. “Lo importante es hacer lo que a ti te haga sentir en paz”, dice.

La transformación y el inicio de la primavera

La primavera trae consigo felicidad, ya que los días son más iluminados y las personas suelen estar más contentas. En ese sentido, resulta importante preguntarnos: ¿las estaciones del año afectan en nuestro proceso de duelo y de transformación?

Para la profesional colaboradora de Contigo en el Recuerdo, los cambios de estación pueden provocar efectos tanto positivos como negativos.

“Comienza el calor y hay más horas de sol, por lo que las personas en duelo podrían sentir que desentonan con el ritmo de los demás. Por eso, toma decisiones en pro de tu bienestar, sin embargo, intenta no aislarte por completo de tu entorno”, comenta.

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También es probable que tengas más ánimo, ya que la vitamina D que nos brinda la luz solar nos hace naturalmente bien.

“Si te sientes bien y tienes el ánimo de salir, aunque estés viviendo un duelo, realiza actividades que te gusten. Esto nos ayudará a sobrellevar la pérdida y el proceso de transformación que estarás enfrentando”, concluye Paula Merino.