En Chile y en el mundo, son millones las personas que tienen una mascota. Los animales, ya sean perros, gatos, hámster o conejos, siempre dan amor incondicional a sus dueños, por lo que, al poco tiempo de llegar a una casa, se convierten en un miembro más de la familia.

Es más, en la actualidad el papel que juegan los animales en la vida de las personas es muy importante, ya que muchas familias optan por retrasar la crianza de los hijos y deciden tener una mascota. Algo similar ocurre con quienes viven solos, ya que su única compañía puede ser un perro o un gato que le entregará afecto incondicional.

Es por eso que, quienes han enfrentado la pérdida de una mascota saben el dolor que se siente. No es fácil asumir que nuestro amigo y miembro de la familia ya no estará más con nosotros, y que tampoco volverán los momentos de alegría y cariño que el animal querido regalaba cada día a sus dueños.

Un estudio realizado por el Departamento de Ciencias Animales de la Universidad de Hawai, Estados Unidos, reveló que cuando fallece una mascota, el 30% de los dueños sienten dolor durante 6 meses o más, y en un 12% de los casos, este triste hecho fue vivido como un evento severamente traumático en la vida de las personas.

Esto demuestra que cada familia vive de manera diferente el duelo por la pérdida de su mascota, y que el nivel de dolor que se experimenta dependerá de la edad del animal, de la personalidad del dueño, del tiempo que ambos vivieron juntos y de las circunstancias del fallecimiento, entre otros factores.

Por ejemplo, si la mascota era un perro de trabajo o un animal de terapia, el dueño no solo sufrirá la pérdida de un amigo, sino también la de un compañero de trabajo y de su independencia. También, si la persona vivía sola y este animal especial era su única compañía, aceptar su fallecimiento puede ser aún más difícil.

Lo importante es entender y asimilar que sentir negación, culpa, rabia y tristeza es normal, ya que se está enfrentando la pérdida de un ser querido y se debe comenzar a vivir un proceso de duelo. Recuerda esto cuando te encuentres con personas cercanas que no entienden que estés sufriendo por el fallecimiento de tu mascota. Puede que ellos no sepan el sabor amargo que se siente cuando alguien cercano muere, ni la mezcla de sentimientos que se generan.

¿Cómo enfrentar la partida de una mascota?

– No te sientas culpable

Evita sentirte culpable por la muerte de tu mascota. Una de las etapas iniciales del duelo es sentirte culpable y responsable por su fallecimiento. Evita preguntarte y pensar sobre qué habría pasado si hubieras hecho las cosas de manera diferente. Hacerlo solo te pondrá peor y hará que sea más difícil para ti superar el duelo.

– Expresa tus sentimientos

Sentirse triste, conmocionado o solo es una reacción normal ante la pérdida de una mascota querida. Exhibir estos sentimientos no significa que seas débil, simplemente, significa que estás de luto por el fallecimiento de un animal que amabas, por lo que no deberías sentirte avergonzado.

– Enfrenta el dolor

Tratar de ignorar tu dolor o evitar que aparezca solo lo empeorará a largo plazo. Para una sanación real, es necesario enfrentarlo y tratarlo activamente. Al expresarlo, es probable que necesites menos tiempo para sanar que si lo retienes u ocultas. Escribe sobre tus sentimientos y habla de ellos con otras personas que simpaticen con tu pérdida.

– Todo a su tiempo

El duelo es tuyo, y nadie más puede decirte cuándo es el momento de “seguir adelante” o “superarlo”. Siente tu dolor sin vergüenza. Está bien estar enojado, llorar o no hacerlo. También está bien reírse, encontrar momentos de alegría y superar la situación cuando estés listo.

– Un ritual a su memoria

Los rituales pueden ayudar a la curación del alma. Un funeral puede ayudarte a ti y a los demás miembros de tu familia a expresar abiertamente los sentimientos. Ignora a las personas que piensan que es inapropiado realizar un funeral por una mascota y haz lo que consideres adecuado.

– Ríndele un homenaje

Preparar un pequeño monumento conmemorativo, plantar un árbol en memoria del animal que ha partido, compilar un álbum de fotos o compartir los recuerdos que disfrutaste con tu mascota, pueden ser una forma bonita de recordarla.

– No descuides tus otras mascotas

Si tienes otras mascotas trata de mantener tu rutina normal. Los animales que sobreviven también pueden experimentar la pérdida o angustiarse por su dolor. También puedes aumentar el ejercicio y el tiempo de juego.

Es importante que sepas que nunca olvidarás a tu querida mascota. Pero, con el paso del tiempo, el dolor y la pena se aliviarán. Y, cuando llegue el momento, es posible que te sientas preparado para abrir tu hogar a un nuevo animal que necesite de una familia que lo quiera.