Quizás has escuchado que una vez pasado el tiempo, es bueno repasar lo vivido tras el fallecimiento de una persona que queremos o conocemos. Pero ¿es necesario?, ¿qué ganamos con hacer esta autoevaluación? A continuación, te entregaremos algunas perspectivas, aprendizajes y beneficios de revisar lo acontecido durante el duelo.
La tarea a realizar
Lo primero que debemos decir es que se puede. Sí, se puede hacer una evaluación de lo que hemos vivenciado desde que el ser querido falleció.
Eso sí, hay detalles. Según la psicóloga colaboradora de Contigo en el Recuerdo Constanza Guzmán, uno de los primeros aspectos a considerar es que la evaluación que hagamos de nuestro propio camino es personal.
“Se puede evaluar pero en parámetros propios, y sin comparar con duelos ajenos”, afirma la profesional, quien detalla que las vivencias de cada persona son distintas siempre, y la pérdida no es la excepción.
Puedes leer: Las emociones son el condimento de la vida
Hecha esta salvedad, existe una serie de formas para hacer nuestra evaluación.
Una de ellas es ver la intensidad de las emociones a través del tiempo, para entender el proceso personal que estamos viviendo. Otro elemento clave es, de acuerdo con Constanza Guzmán, la “tolerancia frente al dolor del recuerdo de la persona que partió”. Esto nos indicará cuánto hemos sanado y cómo hemos continuado con el vínculo.
Ver video: Cómo mantener el vínculo con nuestros seres queridos fallecidos
Los beneficios de hacer este ejercicio son variados. Para la experta de Contigo en el Recuerdo a veces “cuesta ver más allá del dolor presente y puede quedar una sensación de estancamiento en el duelo”.
Por eso, detalla, mirando hacia atrás también se puede evidenciar un cambio, permitiendo “un poco de esperanza y alumbrando la salida al final del túnel”.
Lecciones y aprendizajes después del duelo
Si pudiste hacer los ejercicios anteriores y ver los beneficios de auto evaluarse, te preguntarás como saber qué has aprendido en el proceso y con qué cosas se queda.
Aunque en este aspecto no hay respuestas correctas, sí podemos dar algunas luces para que la revisión nos ayude de cara al futuro.
Artículo relacionado: ¿Puedo aprender o salir fortalecido de este dolor?
Para Constanza Guzmán, la introspección es importante. Este verdadero viaje interior nos permite sacar lecciones y dar pasos firmes de cara al futuro.
Y uno de esos aprendizajes justamente es saber “habitar las emociones que sentimos”, ya que muchas veces se evitan algunos sentimientos, especialmente los negativos, que pueden llegar a ser potentes motores de cambio.
La profesional complementa asegurando que este aprendizaje nos permitirá mirar las herramientas que hemos usado para sobrellevar el duelo, recordar a las personas que nos han apoyado y aclarar nuestras prioridades.
“Al final, es quedarse con lo que nos haga más sentido al momento de evaluar nuestro proceso de duelo”, concluye Constanza Guzmán.