El apoyo de nuestros seres queridos es muy importante cuando vivimos una pérdida significativa, ya que nos brindan protección y sostén. Pueden acompañarnos a través del consuelo, la escucha y las palabras. Sin embargo, estas últimas nos pueden reconfortar, como también incomodar.  

Las frases como: “no llores” o “está mejor en otro lado”, podrían afectar a quienes están viviendo un duelo.

¿Cómo enfrentarse a estas palabras?

Cuando le damos nuestras condolencias a un ser querido, lo que menos queremos es generar más daño. Sin embargo, hay algunas frases que, si las decimos, podrían perjudicar su proceso.

Para la psicóloga de Contigo en el Recuerdo, María Ignacia Sandoval, esto pasa porque hay algunos comentarios que no son coherentes con la vivencia de quien enfrenta una pérdida y suelen apurar su proceso. Por ejemplo, hay personas que les dicen “no llores” cuando solo quieren llorar.

Dentro de este análisis, también explica que puede haber un factor vinculado a la incapacidad de tolerar el dolor ajeno.

Video: Qué decir y qué no a quien vive un duelo

“Como sociedad hemos intentado alejarnos del sufrimiento emocional y muchas veces no sabemos qué hacer cuando alguien llora frente a nosotros”, comenta.

De hecho, agrega, muchas frases que se dicen son estereotipadas y solo hieren a la persona que sufre, aunque la mayoría de las veces no vienen con maldad ni con intenciones de herir, sino de ayudar y de intentar sanar su dolor.

Acciones concretas

Por lo mismo, si estamos viviendo un duelo y recibimos un comentario que nos afecta, María Ignacia Sandoval recomienda poner límites.

“Cuando comprendo que algunas frases me hieren, los límites que quiero establecer se vuelven claros”, complementa.

Una forma de hacerlo es expresando de forma directa lo que la situación nos hace sentir. Por ejemplo: “Cuando lloro, tú me dices que debo dejar de hacerlo. Eso me pone triste y me hace querer alejarme de ti”, ejemplifica la especialista.

Posteriormente, debemos ser claros en cuanto a lo que nos gustaría que esa persona hiciera, porque puede que no necesariamente sepa cómo actuar frente al dolor.

“Esto le ayudará a realizar una acción acorde a nuestras necesidades”, explica.

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Ahora bien, sabemos que el duelo es un proceso de desgaste emocional, por lo que, si queremos ser más breves y precisos, puedes decir: “Lo que dices no me hace bien”.

Poder expresar las necesidades que tenemos nos permitirá sentirnos cómodos en nuestro proceso de duelo y también, le permitirá a los demás a ayudarme de manera más certera.